Me quiero tal y como soy

Desde muy pequeño me costo encajar con las personas, no era atrevido, ni hablador y si me apuras ni gracioso. De alguna manera me costaba encajar en cualquier grupo de personas. Esto siempre fue un problema para mi, mi timidez y mi miedo a no caer bien.

Pasaron los años y ese problema cada vez era mas grande, y me empece a encerrar en mi mismo. Me sentía muy desgraciado , e incluso me sentía inferior a los demás. Todo en mi eran sensaciones negativas. Apenas tenia amigos, era incapaz de interactuar con nadie porque mi cabeza era como un hervidero, y que digo, y si se ríen de mi, y si les caigo mal, etc… todo esto era una barrera que me impedía relacionarme con los demás.

Se que se reían de mi, me llamaban friki, y que era el rarito. No se si por vacilarme, o no se porque, un día en el patio del instituto un grupito de los "malotes" me llamo y me ofrecieron unas caladas de porro. Yo estaba como inmóvil sin saber que hacer, y acepte, si decía que no, pensaba, era peor, fume ese día, y después varios días mas. Sentí una liberación de mi mismo que de alguna manera me hacia escapar de ese mundo que tanto me dolía.

Cuando me quise dar cuenta, estaba fumando todos los días, de alguna manera no podía dejarlo, pero lejos de ayudarme, acrecentó mas mi problema. Me daba mucho mas miedo las personas, tenia pánico a muchas cosas, y empece a tener paranoias, los porros me estaban dejando peor.

Ya apenas salia de mi cuarto, me costaba hasta ducharme, estaba bloqueado y no podía ni estudiar.

Mis padres ya estaban asustados conmigo, se temían lo peor, porque lo poco que hablaba con ellos era para decirle que no quería vivir.

Hablaron con varios médicos, me mandaron medicación psiquiátrica, pero eso me ponía mucho peor, el ansia de la muerte era cada vez mas grande. Yo no quería tomar esas pastillas porque notaba que me hacían mucho daño.

Mis padres se dieron cuenta de que esa no era solución, y que sino actuaban rápido y de una manera drástica me perdían.

Encontraron Narconon Los Molinos, podían ingresarme inmediatamente, y la terapia era natural e individual. Al principio me parecieron un poco de mas exagerados pues me ingresarían por tiempo, pero bueno, accedí, tampoco tuve otra elección.

Conforme hice el programa, fui notando mucha mejoría en mi, pero cuando hice los ejercicios de comunicación me abrieron el mundo. Empezaba a poder comunicar lo que pensaba sin consideraciones, me sentía persona porque sentía que lo que yo tenia que ofrecer al mundo era importante. Con el curso de objetivos me descubrí a mi mismo, descubrí la cantidad de habilidades que yo podía ofrecer al mundo, y que realmente no era menos que nadie y que el único que se había invalidado era yo y me había cerrado las puertas del mundo.

Ahora después de hace varios meses que termine el programa, he vuelto a estudiar, no me siento acomplejado, estoy totalmente limpio y se que puedo lograr mi camino. Se quien soy y me quiero. Muchas gracias a Narconon porque gracias a ellos me he encontrado a mi mismo.

Borja—Graduado de Narconon Los Molinos